Pacto Verde Europeo: se acuerda una nueva ley para reducir las emisiones de la aviación mediante el fomento de combustibles sostenibles

El Parlamento y el Consejo Europeo alcanzaron en abril un importante acuerdo sobre la propuesta que pretende descarbonizar el sector de la aviación: ReFuelEU Aviation.

Una vez esté en vigor, la nueva norma exigirá a los proveedores de combustible que combinen el queroseno con combustibles de aviación sostenibles (SAF) en cantidades que aumentarán progresivamente a partir de 2025. Así, los combustibles sostenibles de aviación deberán representar el 2% del combustible suministrado en los aeropuertos de la Unión Europea en 2025, aunque aumentarán hasta alcanzar el 70% en 2050. Además, la nueva mezcla de combustible de aviación de la Unión deberá contener también una proporción mínima de los combustibles sintéticos más modernos y respetuosos con el medio ambiente, que también aumentará con el tiempo.

Se prevé que esta medida, por sí sola, podrá conseguir que las emisiones de CO₂ de la aviación se reduzcan alrededor de dos tercios para 2050, en comparación con la hipótesis de no intervención, y aportará beneficios climáticos y de calidad del aire, al reducir también otras emisiones contaminantes distintas.

Los operadores de aeronaves que despeguen de aeropuertos de la UE deberán repostar solo con el combustible necesario para el vuelo, a fin de evitar emisiones relacionadas con el peso añadido o la fuga de carbono causadas por prácticas de «sobrerrepostaje». Además, los aeropuertos deben garantizar que disponen de infraestructuras de abastecimiento de combustible aptas para la distribución de SAF.

En 2025 se implantará una etiqueta de la Unión sobre el comportamiento medioambiental de los vuelos, en virtud de la cual las compañías aéreas tendrán que indicar la huella de carbono por pasajero y la eficiencia de CO₂ por kilómetro de sus vuelos, para que los pasajeros puedan comparar el comportamiento de las distintas compañías en la misma ruta.

La obligación de mezcla abarca los biocombustibles, los combustibles de carbono reciclado y los combustibles de aviación sintéticos (electrocombustibles) de acuerdo con la Directiva sobre fuentes de energía renovables, pero excluyen los cultivos alimentarios y forrajeros a fin de respaldar los objetivos de sostenibilidad.

A partir de 2030 también entrará en vigor un subobjetivo específico para los combustibles sintéticos derivados del hidrógeno verde. A partir del 1,2% en 2023, se ampliará hasta el 5% para 2035 y alcanzará el 35% para 2050.

Infografía – Fit for 55: increasing the uptake of greener fuels in the aviation and maritime sector