05 Jul 2023
BIOPLAT celebra la publicación del texto de la RED III referente a biomasa, que pone fin a más de un año de incertidumbre del sector
BIOPLAT celebró en marzo el texto definitivo que se acordó para la nueva Directiva de Renovables (RED III, actualización de la RED II vigente) y que finalmente no incluirá la definición de ‘biomasa leñosa primaria’ que tan perjudicial habría resultado para los intereses de España. El texto, acordado in extremis por la Presidencia Sueca de la Unión Europea y el Parlamento, se conoció tras más de un año de incertidumbre y varios meses de intensas negociaciones en la fase final de trílogos.
La posición del Parlamento Europeo durante el proceso de actualización de la Directiva, motivado por el nuevo y más exigente objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero que trajo el paquete europeo ‘Fit for 55’ en julio de 2021, optaba por limitar drásticamente el consumo de biomasa forestal en la RED III mediante el establecimiento de una definición de ‘biomasa leñosa primaria’ que prácticamente englobaba toda la biomasa forestal excepto la generada por las industrias forestales (que generalmente se auto consume en dichas industrias y no llega al mercado).
A diferencia de lo que ocurre en los países del norte de Europa (donde grandes centrales de carbón de cientos y miles de MW se reconvirtieron a centrales de biomasa), el establecimiento de esta definición en la RED III hubiera impactado de forma muy negativa en España; no solo en el sector de la biomasa, sino también en los montes y en el sector forestal, con derivadas muy arriesgadas sobre los incendios forestales.
Esto fue precisamente lo que analizaba el Manifiesto Científico promovido por BIOPLAT y firmado por más de un centenar de científicos y académicos españoles, que se remitió a la Vicepresidenta Tercera del Gobierno y Ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, a finales de 2022. Esta posición, además, estaba perfectamente alineada con el resto de países mediterráneos, cuyos sectores son mucho más parecidos al de España que al de los países del norte, y quienes además comparten la terrorífica problemática de los incendios forestales que cada verano arrasan sus montes.
Tras más de un año de enorme incertidumbre, el sector puede respirar tranquilo. Si bien lamenta que se hayan establecido nuevas limitaciones que deben aplicarse de forma retroactiva, como aumentar al 80% el ahorro de emisiones de GEI en las centrales respecto a la alternativa fósil, agradece que finalmente se permita el aprovechamiento de la biomasa forestal en España para seguir conjugando la sostenibilidad y la conservación de nuestro capital natural con la gestión forestal sostenible, la lucha contra los incendios forestales, la transición energética y la bioeconomía.